El Programa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de Ciudades y Comunidades Amigables con las Personas Mayores han publicado un informe titulado "Entornos amigables con las personas mayores: evaluación de línea base en América Latina con referencia a Costa Rica".
Consolidar entornos amigables para las personas mayores es un objetivo de la Década del Envejecimiento Saludable 2021-2030. Para poder avanzar en este objetivo, se requiere como primer paso realizar una evaluación de referencia, con la participación activa de las personas mayores, que determine las áreas en las que las ciudades y las comunidades deben trabajar para remover las barreras que experimentan las personas mayores y crear entornos cada vez más amigables y adaptados a sus requerimientos. El programa de la OMS recomienda la utilización del Protocolo de Vancouver para realizar esta evaluación. El Protocolo de Vancouver es un recurso validado a nivel internacional por expertos técnicos y académicos que guía la investigación desde un enfoque integral e intersectorial, el cual promueve la participación y la inclusión de las personas mayores y las ubica en el centro de la estrategia de políticas. Debido a las particularidades de su ejecución, muchos países de América Latina hicieron adaptaciones para favorecer la implementación local y subsanar las dificultades que se presentaron.
Con el objetivo de perfilar el conocimiento actual disponible en América Latina y tomar en consideración las experiencias de las ciudades y comunidades de la subregión, el documento recopila algunos ejemplos y casos de estas adaptaciones, como el programa implementado en Costa Rica, que servirán para orientar las acciones de políticas hacia el desarrollo pleno de las personas a lo largo de todo el curso de vida.
A fin de dar respuesta a los desafíos que plantea la transición demográfica, es fundamental crear instrumentos que permitan adaptar los entornos de modo de favorecer el envejecimiento saludable, para lo cual se debe contar con información certera, actualizada y eficaz.
Las experiencias recopiladas en el documento subrayan la importancia de llevar adelante una estrategia intersectorial que contemple las capacidades técnicas y las particularidades de los gobiernos locales, y que considere a la población específica de personas mayores de cada lugar, para realizar el diagnóstico de amigabilidad de una ciudad o comunidad.
El objetivo común y el concepto realmente significativo del proceso de adaptación y modificación de las estrategias se basan en la exigencia de efectuar un buen diagnóstico de referencia para lograr acciones que respondan a las necesidades de la población, y en la idea de que una ciudad o comunidad amigable con las personas mayores es un lugar más amigable con todas las personas.
Para ver el documento completo: https://iris.paho.org/bitstream/handle/10665.2/59383/9789275327722_spa.pdf